Hace millones de años, en el fondo del océano Pacífico se formó una cadena montañosa. Durante milenios, esta cordillera chocó y se fusionó con el continente Americano. Un terreno accidentado, adornado con grandes volcanes y picos llegó a conocerse como la cordillera de las Cascades del Norte, ubicada en el estado de Washington (National Park services, 2021). ¡Sé testigo de una belleza sin igual, la cual hace de esta zona un escenario único!
Para las tribus nativas americanas locales, el Monte Kulshan, también conocido como Mount Baker, es sagrado. Se eleva a 10, 781 ‘/ 3286 metros, lo que lo convierte en el pico más alto de las Cascadas del Norte. Un estratovolcán activo cubierto de glaciares profundos, ubicado cerca de la frontera con Canadá y dentro del Bosque Nacional Mt. Baker-Snoqualmie, esta montaña está rodeada de una belleza asombrosa. Tuvo su última gran erupción hace cerca de 7000 años, pero actualmente está activo, y se pueden ver ligeras nubes de vapor saliendo de su cráter periódicamente (USGS, 2021).
Habíamos visitado algunos de los otros volcanes famosos de la zona, incluidos el notorio Mt. St. Helens, Mt. Rainier y también Mt. Hood, en Oregon, todos parte de la Cordillera de las Cascades Norte y Sur. Hemos visitado Mt. Baker y sus alrededores varias veces. Esto ha incluido acampar, esquiar, escalar y también sobrevolar el área. Exploramos Baker Lake, Lake Shannon y el pueblo de Concrete. Para esta publicación, nos gustaría escribir específicamente sobre una determinada ruta de senderismo que disfrutamos, Heliotrope Ridge.
Esta caminata en particular, una de nuestras favoritas, es parte de una de las rutas de escalada a la cima de Mt. Baker. Se encuentra a unas 120 millas / 183 km. al norte de Seattle, cerca del pequeño pueblo de Glacier, y es parte de una red de senderos. Recomendaría detenerse primero en el Glacier Visitor Center, un punto de partida escencial. El momento en que fuimos fue un hermoso día claro de verano. Después de estacionar el automóvil, mi familia y yo pronto nos sumergimos en el bosque. Cedros rojos, pinos, maples, robles, ¡todo tipo de árboles! El sendero es claro y está muy bien mantenido, bastante accesible. A después de unas tres millas, esta el primer riachuelo y la primera vista clara del volcán. ¡Difícil de describir! El vasto bosque de color verde obscuro y la enorme montaña blanca que lo corona. Águilas calvas que circundan el cielo azul cegador. ¡Estábamos allí!
Poco después, nos encontramos con bosques cubiertos de musgo y cascadas. Nos detuvimos en un segundo arroyo donde el agua corría mucho más rápida y profunda. Grandes rocas marcaban el arroyo por encima y por debajo de nosotros. Tuvimos que quitarnos las botas de montaña y las calcetas, y así determinar qué tan seguro era el cruce, y también considerar (haciendo conjeturas) si el arroyo sería transitable horas más tarde, en el camino de regreso. No estába tan mal, pero ciertamente noté la cara de mi hija mientras lo cruzaba 🙂, ¡el agua era glacial!
Después de un par de millas, llegamos a la línea de árboles, la altitud donde la mayoría dejan de crecer. ¡Ahora, la vista era simplemente irreal! Un mar de montañas azules . A ambos lados del sendero florecían flores de todos los colores, contrastando con el verdor, y cerca al fondo estaba Mt. Baker, espléndido y majestuoso. ¡Ahora estábamos tan cerca! Sus paredes de hielo estaban casi al alcance de la mano. Tomamos un largo descanso, almorzamos y tomamos fotos. Luego llegamos al glaciar, ¡Lo logramos! Y podría yo haber seguido mas arriba, pero perdí el voto de la mayoría 🙂. ¡Qué increíble caminata familiar! ¡Nos dirigimos de vuelta a casa!
Referencias:
- National Park Service 2021 “North Cascades, Geologic Formations“.
https://www.nps.gov/noca/learn/nature/geologicformations.htm
- USGS, Science for a Changing World. 2021 “Mount Baker Summary“